Atitlán, con fiebre de colores
y corazón de rosas,
va desnudando aromas
de colibrí y quetzal.
Al borde de las aguas
un pueblo de chabolas
y niñas, muchas niñas,
mayas puras,
visten de arco iris
su piel solar, cobre y luz,
de ellas
una diosa dejó su cabellera
al viento que abrazaba
los volcanes cercanos.
Aura Marina, mirada verde jade,
ofreciendo sus telas
del telar de cintura.
Antología Poemas. OmniaBooks. 2022.