Esta noche el frío
ha matado al geranio rosa.
Vivía entre paredes, estaba bien,
acostumbraba a despertar
cuando el vecino del ático
subía la persiana plastificada
y los brillantes pájaros celestes
iban a dormir sus incestos.
Su aseo personal
con el gel especial lágrimas de noche
se completaba arropado
por suave albornoz rayo de sol
y sólo él conocía esa manera
de estar chic
sin esperar a las rebajas.
Amaba silenciosamente
a la petunia del pequeño invernadero
- siempre tan presentable -
y se desayunaba con musicamotor
mientras filosofaba
con su eterna pregunta
si el ser
era autopista, calle o autovía.
No entendió por qué
comenzaron a caerle las manos
a pesarle los ojos
a dolerle la vida
ni qué querían aquellos
labios sombríos y raudos
sobre la frente rosa
pero
por un momento creyó saber
el fin de la filosofía.
Huir en la palabra. AFCT - Poesía. 1997.
Remembrança nostàlgica...
ResponEliminaMoltes gràcies, Víctor!!!!!
EliminaMaco!
ResponEliminaMoltes gràcies, terrassistes!!!!!
Elimina¡Felicidades, guapísima!
ResponElimina¡Muchas gracias, guapísimo!
EliminaBonic!
ResponEliminaMoltes gràcies, Tània!!!!!
EliminaEnhorabona!
ResponEliminaMoltes gràcies, Alícia!!!!!
Elimina